Entre las muchas funciones que puede realizar este aparato, una de ellas es la de convertirse en un eficaz grabador portátil. Para que pueda utilizarse en estas labores, hacen falta dos cosas: un programa de grabación y un micrófono de calidad, o algún sistema para conectárselo. Por siempre existen ambas cosas, y a precios bastante moderados (para compensar, todo sea dicho, el poco moderado precio del iPad).